Starship de SpaceX: Noveno vuelo termina en falla tras pérdida del propulsor
Colaboradores
El noveno vuelo de prueba de la Starship de SpaceX, lanzado el 27 de mayo desde la Starbase en Texas, terminó en un nuevo revés poco después del despegue. A pesar de un lanzamiento y ascenso inicial exitosos, la nave espacial comenzó a girar sin control debido a una fuga en el sistema de combustible, lo que impidió realizar la prueba del escudo térmico. La misión tenía como objetivo desplegar ocho satélites simuladores Starlink y probar el sistema de reentrada del vehículo con 100 losetas de escudo térmico removidas.
Poco después de alcanzar el espacio, la etapa del propulsor, crucial para la reentrada de la nave espacial, se perdió durante su regreso a la atmósfera. Además, la puerta de la carga útil no se abrió durante el vuelo. Los restos de la nave que no se desintegraron por el calor de la reentrada terminaron en el Océano Índico, según la compañía.
El CEO de SpaceX, Elon Musk, comentó en X después del vuelo de prueba: "¡Starship llegó al corte programado del motor de la nave, una gran mejora con respecto al último vuelo! Además, no hubo una pérdida significativa de losetas del escudo térmico durante el ascenso". Musk también mencionó la posibilidad de realizar los próximos tres lanzamientos de prueba de Starship cada tres o cuatro semanas.
¿Qué significa este revés para el futuro de Starship?
Este incidente marca otro contratiempo para el programa Starship de SpaceX, que ha enfrentado desafíos en pruebas anteriores. La compañía ha experimentado problemas con el sistema Starship, incluido un vuelo abortado a principios de este año en abril.
A pesar de las dificultades, SpaceX mantiene una postura optimista. En una declaración compartida a través de X, la compañía reconoció el fracaso y enfatizó la importancia de aprender de cada vuelo: "El éxito proviene de lo que aprendemos".
El ambicioso objetivo de Starship
SpaceX está desarrollando Starship, el cohete más grande y potente jamás construido, para ayudar a la humanidad a establecerse en la Luna y Marte, entre otras tareas. Los dos componentes del vehículo son un propulsor gigante llamado Super Heavy y una nave espacial de etapa superior de 52 metros de altura conocida como Starship. Ambos están diseñados para ser totalmente y rápidamente reutilizables, y ambos están impulsados por el nuevo motor Raptor de SpaceX: 33 para Super Heavy y seis para Starship.
- Desarrollo continuo: SpaceX sigue recopilando datos valiosos de cada vuelo de prueba.
- Enfoque en la reutilización: La reutilización es clave para reducir los costos de los viajes espaciales.
- Próximos lanzamientos: Se esperan más lanzamientos de prueba en las próximas semanas y meses.